Por Kelvin Ortiz Faña
El destacado empresario dominicano residente en Estados Unidos, Yomare Polanco, ha sido víctima del fraude colosal como nunca visto en la diáspora dominicana.
Es cuesta arriba, que más de un año de aquellas elecciones fraudulentas, donde no se reconoció la voluntad de los votantes, aún estén libres y sueltos en las calles, lo que patrocinaran tal barbaridad.
A pesar de que Yomare Polanco es una persona prudente, con temor a Dios, es un humano y la injusticia tiene su limite. Ha recorrido todas las instancias, habida por haber, para que se reconozca, no solamente su triunfo, si no también, la voluntad de los cuidados que votaron por él.
Lo extraño de este fraude colosal, es que los principales líderes dominicanos han pendido que se haga justicia a favor de Yomare, pero no obstante a eso, el actual presidente de la Junta Central Electoral, reconoció lo que el líder de la diáspora dominicana ha estado denunciando, las irregularidades en aquel proceso electoral.
Yomare Polanco han presentado pruebas irrefutables, que le ha permito a la Junta Central Electoral, suspender y hasta cancelar funcionarios.
El país y los dominicanos en la diáspora, esperan por el Tribunal Constitucional, para que falle en derecho y a favor de Yomare Polanco, pero lo ante posible. Ya las pruebas están ahí y hay precedente del propio órgano para reconocer quién ganó las elecciones realmente.
Yomare Polanco necesita justicia y junto a él, toda la diáspora dominicana. ¿Qué esperan?
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