Por: Pedro René Almonte M.
Inexorablemente, debemos reconocer que hemos dado un gran salto adelante, y es que recientemente la República Dominicana, fue testigo de un acontecimiento nunca antes visto. Los dominicanos con dos dedos de frente , se quejan de que la sociedad siempre va varios pasos adelante que sus políticos , pero pienso que lo que vivimos con los debates presidenciales y vicepresidenciales, es algo que debemos celebrar y aplaudir.
En tal sentido , cuando escuché que el Presidente Abinader había aceptado ir al debate , automáticamente afirmé que el Presidente ganó de entrada el debate sin explicar una sola propuesta o iniciativa . El solo hecho de que un presidente en ejercicio , en busca de la reelección y puntero en las encuestas , aceptara ir a un debate, es un hito histórico en la política dominicana , que envía una señal clara de que algo hemos avanzado , yo diría que mucho .
Sería yo un mezquino de marca mayor si no reconozco y felicito al Presidente por darle un giro al modo de operación de nuestros políticos . Ningún mandatario había aceptado confrontar ideas con sus opositores de esa manera .
Posteriormente, cuando vi los debates, dije no fue el Presidente que ganó el debate, fue el país que ganó. Ver a tres mujeres (candidatas vicepresidenciales) debatir sobre los problemas y propuestas para resolverlos , sentí que mucho hemos avanzado . En cuanto a la participación de cada uno, tanto los candidatos presidenciales y vicepresidenciales, tengo que decir que estuvieron a la altura de las circunstancias, unos con mayor nivel de fluidez y contenido que otros pero en general, muy satisfecho con lo que vi. Dicho acontecimiento no hubiese sido posible, si alguien que realmente busca cambiar y dejar un legado en este país no hubiese aceptado ir al debate, a sabiendas que eso era poner el pecho para recibir flechazos de quienes quieren ocupar la silla que él calienta. Presidente Luis Abinader , muchas gracias .
El país ganó mucho con esa iniciativa , y crea un buen precedente . No creo que después de esto, los candidatos presidenciales y presidentes en ejercicio que vengan se atrevan a no ir a un debate. El que no acepte después de ahora, podría perder las elecciones ipso facto.
