
Por Bellelyn Castillo
El Pregonero, Santo Domingo. – La comunicadora Erika Infante expresó su descontento con la actual gestión del Ministerio de Cultura, calificándola como una decepción no solo personal, sino también para la ciudadanía en general.
Durante una intervención en el programa El Mañanero, Infante lamentó que una institución tan importante no esté cumpliendo con las expectativas ni con su misión de promover el desarrollo cultural en el país.
“La cultura lo es todo. Es la permanencia de lo bueno en el tiempo, es la inversión en las aulas y en las artes, es la implementación de programas que incentiven la lectura, la creatividad y el aporte a nuestra identidad. Y lamentablemente, siento que el Ministerio de Cultura, que en un momento fue uno de los más eficientes, nos ha fallado como nación”, manifestó Infante.
La comunicadora recordó cómo, en sus inicios, tuvo esperanza en la actual ministra al verla asumir su cargo. Sin embargo, aseguró que esa ilusión se desvaneció al constatar la falta de resultados significativos.
“En un momento vi a la ministra desde la televisión y me esperancé en que pudiera hacer una excelente gestión, pero qué mal. No solo me ha decepcionado a mí, sino a todo el pueblo dominicano”, afirmó.
Infante subrayó que el desarrollo cultural es un pilar fundamental para el progreso de cualquier sociedad y señaló que el país requiere políticas públicas que realmente impacten en la educación artística, las iniciativas comunitarias y la preservación de su patrimonio.
Sus declaraciones reflejan el descontento de diversos sectores de la sociedad que consideran que el Ministerio de Cultura no ha cumplido con sus objetivos en los últimos años. La gestión actual enfrenta cuestionamientos sobre la falta de programas que promuevan el acceso a la cultura y el arte como herramientas de transformación social.
Infante concluyó haciendo un llamado a replantear las estrategias en el ámbito cultural y a priorizar acciones que verdaderamente beneficien al pueblo dominicano, devolviendo a la cultura el lugar que merece en el desarrollo nacional.