El futuro de la teleportación de información

Por El Pregonero

Por: Araceli Aguilar Salgado. 


El Pregonero.- “El internet debe ser un medio de comunicación entre los pueblos que contribuya a la paz mundial y que el principal objetivo de la alta tecnología es mejorar el nivel de vida de las personas.”. Larry Ellison.

En el sector de telecomunicaciones las capacidades de conectividad nos han permitido enfrentar la pandemia, la crisis global de salud, de una manera nunca antes vista el internet tiene una asombrosa capacidad de manipular datos, pero se puede imaginar una red mundial de comunicaciones mucho más rápida, eficiente y sobre todo segura.

Para hacerla realidad tenemos que aprender a aprovechar las propiedades de la mecánica cuántica. Los primeros pasos ya están dados. 

El internet cuántico es un conjunto de sistemas, protocolos y dispositivos teóricos que permiten conexiones extremadamente seguras entre ordenadores.

Se basa en fenómenos tales como la teleportación cuántica y el uso de qubits, a diferencia del internet clásico, aunque hay distintos métodos para establecer estas conexiones, todas utilizan algún aspecto de la mecánica cuántica.

El objetivo último es la creación de una red basada en el fenómeno del entrelazamiento cuántico, entre los grandes éxitos conseguidos, se encuentra el de transformar las longitudes de onda visible que salen de los qubits de diamante a longitudes de onda más largas (infrarrojas) que pueden viajar bien a lo largo de fibra óptica.

Para ello, se emplea un método que se basa en la interacción de los fotones con un láser.

En los pocos segundos que tardas en leer este párrafo se habrán lanzado en internet cerca de dos millones de búsquedas en Google, unos 120 millones de correos electrónicos, 10 millones de descargas en la App Store, más de un millón de entradas en Facebook y alrededor de 140 000 tuits.

Y esto es sólo una parte de la inmensa cantidad de información que se genera y mueve por internet continuamente buena parte de esa información es privada, y como tal, debe protegerse de las miradas indiscretas de terceros, es la labor de la criptografía, la ciencia que se encarga de ocultar el significado de un mensaje a todos, menos al destinatario.

La criptografía ha estado a la altura de los hackers y sus potentes máquinas, pero la descomunal potencia de cálculo de una nueva generación de computadoras pondrá en peligro la seguridad de las comunicaciones actuales, hay esperanzas, los científicos ya están trabajando para que en el futuro podamos navegar por la red sin que nadie recopile nuestros datos personales ni intercepte nuestras comunicaciones privadas.

En estos tiempos la sociedad ya exige aumentar drásticamente la capacidad de procesamiento, transmisión y almacenamiento de la información, por lo que el internet cuántico sería la solución: potentes computadoras cuánticas, comunicadas mediante una red que abarcaría todo el planeta y protegidas por la inexpugnable criptografía cuántica.

Gracias a ello el mundo de la simulación de fenómenos complejos recibirá un enorme impulso; por ejemplo, podríamos simular el nacimiento de una galaxia o la evolución del clima con un nivel de detalle jamás imaginado.

De hecho, una computadora cuántica que maneje 1.000 cúbits esto indica la cantidad de bits que pueden estar en superposición, será capaz de representar el estado de todo el Universo, con las 1090 partículas que se calcula que contiene, campos como la química, la biología, la economía, la neurología o incluso los juegos informáticos y la realidad virtual también se beneficiarán de la capacidad de cálculo de las computadoras cuánticas.

En cuanto a la criptografía cuántica, desde hace más de una década hay empresas que se dedican a la comercialización de claves cuánticas.

En Suiza, por ejemplo, el envío del recuento de votos en las elecciones de Ginebra se protege con criptografía cuántica, al igual que las comunicaciones de muchos de los bancos suizos con sus clientes.

Una solución para superar la limitación de la distancia en estos sistemas serían los repetidores cuánticos, análogos a los amplificadores que se instalan en la fibra óptica. Ya hay propuestas teóricas, aunque plasmarlas en el laboratorio resulta muy difícil.

Otra opción es dejar de lado los dispositivos terrestres y recurrir a las comunicaciones vía satélite. Ya se han realizado con éxito algunos experimentos en los que se envían fotones a un satélite y éste los refleja de vuelta, paso previo a que la criptografía cuántica pueda distribuir claves seguras a cualquier rincón del planeta.

Una posibilidad es usar satélites o repetidores cuánticos, es decir dispositivos que miden las propiedades cuánticas y luego transfieran esas propiedades a nuevos fotones, esta idea preserva el enmarañamiento que permite saltar de un repetidor a otro.

Es decir, dispositivos que puedan detener y dar continuidad a la luz, compuesta por esos fotones que transportarán la información. otra opción, es crear los pares enredados de fotones al espacio y difundirlos a bases diferentes en la tierra.

Las opciones de las redes cuánticas parecen ser dos: terrestres o espaciales.

El internet cuántico va mucho más allá de nuestras expectativas más optimistas en 5G y 6G, como han apuntado algunos expertos, se trataría de una conectividad prácticamente ilimitada, instantánea con soluciones descentralizadas de inteligencia artificial, lo que requerirá frecuencias milimétricas, a partir de 26 Ghz, gracias al internet cuántico, en el futuro podremos navegar con la certeza de que nadie, ni siquiera Google, sepa lo que estamos haciendo, hoy es una realidad cotidiana, la tecnología avanza y diferentes ciencias y campos de aplicación

“El mundo disfruta de Internet como si se tratase de un juguete.

Sin embargo, es el arma más poderosa creada por el hombre.” Rubén Serrano

Araceli Aguilar Salgado: Periodista, Abogada, Ingeniera, Escritora, Analista y Comentarista mexicana, del Estado de Guerrero, México.


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