Cuando la pólvora colinda con la chispa

Por El Pregonero

Por: Dionicio López Padilla.


Un aeropuerto colinda con otro.

Podríamos decir que se ha juntado la aventura con la imprudencia. La aventura de los sectores empresariales y la irresponsabilidad política,  fueron algunos de los factores influyentes para que se vea afectada la punta de una pequeña Isla o el extremo de la misma, amenazando con resultados nocivos que hacen peligrar el avance del país,obtenido a base de visión, esfuerzos y perseverancia.

 

Lo antes mencionado va de la mano con la  imprudencia política, que en la conclusión de un mandato, de forma indicada y temeraria, le dió un mal uso al poder que se ha entregado para resguardar los intereses del país y no para ponerlos en peligro.

 

Por lo antes mencionado, la pólvora y  la chispa, sólo podrían estar unidas, si éste acercamiento produjera resultados o  aspectos positivos en favor de los intereses nacionales.

 

Por ejemplo: Sería favorable juntar la pólvora y la chispa, para la construcción de un aeropuerto en  la región sur. De esta manera producir una explosión  en el ámbito turismo donde la economía de la misma se elevará y produjera un alza en sentido económico al país.

Analicemos. ¿Por qué si nuestro país cuenta con un territorio de 48,442 kilómetros cuadrados, se debe insistir en la construcción de un aeropuerto casi sobre el otro?

 

Es inquietante pensar en un incidente aeronáutico en ésta punta turística. Aún peor, un catastrófico accidente aéreo, simplemente por no asumir con responsabilidad la visión del país.

 

Es importante motivar las inversiones privada, e incluso proveer de incentivos a las mismas.

 

Sin embargo, no es lo mismo invertir a  jugar a la Ruleta Rusa con lo logrado hasta el momento.

Ha costado mucho esfuerzo a los dominicanos y al país en  general, recuperar la categoría #1 con la que operamos desde el 2007. Certificación de la Administración Federal de Aviación de los Estados Unidos (FAA).

Además, de la evaluación de la  Organización de Aviación Civil Internacional (OACI).

 

También apoyados por la ley 491-06 de Aviación Civil (IDAC).

 

Éste es el momento en que los dominicanos, debemos asumir con  responsabilidad y posición clara nuestro derecho e  intereses nacionales, para de ésta manera, en  el futuro no  seamos condenados en el juicio de la historia.


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