Conservar la paz en medio de la enfermedad

Por Redacción Pregonero

Hay momentos en los cuales no nos encontramos en nuestro mejor estado de salud corporal.

Las enfermedades, por lo general, merman nuestras actividades cotidianas más elementales como asistir al trabajo, compartir con nuestra familia, etc. Nos sentimos decaídos, sin ganas, pesimistas, en fin, todo lo que ustedes y yo sabemos que pasa.

En mi caminar espiritual he aprendido… y sigo aprendiendo a adoptar una  actitud más sana, a conservar mi paz en medio de las circunstancias de la vida.

Estar en  paz en medio de una enfermedad me ayuda a una pronta recuperación y a adoptar una actitud positiva frente al problema.

¿De qué me sirve preocuparme por algo que no tengo el control? ¿De qué me sirve refunfuñar ante una situación cuando esto no me sirve de nada? Lo recomendable es actuar y ocuparse, no quedarse estático en el problema.

Ya tengo la costumbre de preguntarme frente a una situación: ¿Qué respuesta me genera paz? ¿Lo que pienso, lo que digo, como actúo, me genera paz?  ¿Viene de mi YO o de mi ego?

Todas las actitudes que generan paz, alegría y amor nacen del YO (del verdadero ser); las que no, vienen del ego (percepción errónea de nuestra realidad).

Aprendamos pues a mirar nuestro interior y a ver la luz que hay en nosotros, conservando la paz  no importando la situación en que nos encontremos.

Así que si estás enfermo (a)… ánimo!!! Que ésta sea una oportunidad para cambiar la forma en que ves tu enfermedad, una oportunidad maravillosa para aprender a conservar tu paz y que en medio de todo lo que suceda estés alegre e irradies amor.

Por la Dra. Zaidy Di Franco


Relacionadas