Si Zapatero venció a Pepe Bono y  Leonel venció a Gutiérrez Félix. ¿Por qué no puede ganarle un “novato” a Leonel?

Por pregoadmin

Por: Pedro René Almonte Mejía

En cada historia narrada, siempre se habrá de encontrar la sorpresa; aun siendo ésta (la sorpresa) un insumo de relleno para cubrir algunos huecos. Lo seguro es lo seguro, dicen los conservadores de pensamiento, a los que el riesgo les produce miedo y retortijones de barriga; por otro lado hay quienes la sorpresa, la incertidumbre y lo desconocido les causa cierta sensación, como si los niveles de adrenalina aumentaran.

Pero lo que sí ocurre ciertas veces, es la aparición de las sorpresas. Ocurre en todo ámbito de la vida misma y la política no es una excepción.

Ocurrió una sorpresa , en el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) allá por el verano del año 2000 , cuando un joven diputado leonés llamado José Luis Rodriguez Zapatero , le ganó unas primarias internas al experimentado y todopoderoso José (Pepe) Bono .

Pepe Bono era el “seguro” ganador, partía como favorito pero… apareció la sorpresa. Zapatero ganó por la mínima, por tan sólo 9 votos; pero lo importante es ganar, aunque sea por un voto.

El discurso de renovación de Zapatero, lo que llamó como el “cambio tranquilo” al parecer caló y sectores como los guerristas (grupo de Alfonso Guerra) se volcaron en votar por José Luis, con el voto secreto e individual ocurrió una “tremenda sorpresa”.

Y así siguen ocurriendo sorpresas, cada día ocurren. Si “aplatanamos” la cosa y nos vamos al año 1994, en el PLD para ese año también ocurrió una sorpresa: Un joven desconocido llamado Leonel Fernández venció a Euclides Gutiérrez Félix; mire usted que sorpresa, quién lo podría imaginar. Pues así fue, hasta se dijo desde el sector que adversaba al “joven Leonel” que alguien habría hecho un trabajo “sucio”.

Sucio o limpio, si lo lavaron luego o si le colocaron detergente o lejía, lo cierto fue que el “joven Leonel” dio una tremenda sorpresa.

Para el año 2020, el panorama político dominicano se presenta difícil de predecir, donde nada está claro. Diría que todas las condiciones están dadas para que ocurra una “sorpresa”. Lo primero, es que se asegura  que el candidato del PLD será el próximo presidente.

Hay quienes se la juegan, y afirman que la reelección del actual presidente es un “clavo pasao”, yo no me atrevería a afirmar tal cosa, pero siempre los números serán los que abran alguna puerta a esa posibilidad.

Otros consideran que Danilo debe devolverle el favor a Leonel (el mismo Leonel antes mencionado pero no joven) el cual lo apoyó para que se pusiera “la ñoña” en el 2012. Pero la sorpresa siempre podría estar presente, y tal como ocurrió con el “joven Leonel” en el 1994, pudiera ocurrir que  algún “novato” corriera con “suerte”.

No hablo de los precandidatos de siempre, los que empiezan temprano y también terminan temprano; esos que se cansan mucho antes de la recta final, o que son convencidos para abandonar. Esos ya son súper conocidos, ya sabemos quiénes son y de cuál  pie cojean. Estoy hablando de un “novato” que realmente nos dé una sorpresa a todos. Podría salir pronto, sólo espero que respete los plazos de la flamante ley de partidos políticos,  porque eso es lo que necesita nuestro país: orden e institucionalidad.

Lo que decía Rodriguez Zapatero con el “cambio tranquilo” para el PSOE en el año 2000, se podría parecer al tercer PLD.


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