La Junta Central Electoral se está metiendo en camisa de once varas, cuando solo un partido está de acuerdo con una decisión mientras todos los demás se oponen, por algo es, ahora amenazan con no ir a elecciones y no es para menos, con esta interpretación a la ley, las posibilidades de alianzas provechosas como las que disfrutó el mismo partido de gobierno en las pasadas elecciones con miembros de la Fuerza del Pueblo y el resto de partidos minoritarios, serían nulas.
¿Aguantarán los partidos y se quedarán fuera? Lo dudamos mucho, pero con la experiencia del 2020 debiésemos tratar de pasar este trance en la mayor tranquilidad posible, porque botar a la basura miles de millones de pesos en un país en crisis económica es por decir lo menos, absurdo.
Algo qué tal vez los partidos no han calculado, es que el descreimiento de la gente en ellos, hacen que la población vea con beneplácito la decisión de la JCE en el entendido de que esto haría que desaparezcan unos cuantos, así que en esta lucha contarán con el nulo apoyo de los ciudadanos, cosa que debiera ponerlos a pensar, porque aún ganando este pleito, ha quedado muy claro que la gente no los ve en la mayoría de los casos como sus legítimos representante, si no como rémoras que se alimentan de las sobras de los más grandes y a mediano plazo esto no solo es peligroso para ellos, si no, para la democracia misma.
