Por: Luis Mariano Nova | Presidente del Mov LEAL
El pasado día 06 de enero concluyó con una derrota importante el plan de revertir los resultados de las elecciones de los 50 Estados de los Estados Unidos de América, plan que inició la misma noche del día 03 de noviembre al conocerse los primeros escrutinios que reflejaban una victoria del candidato Demócrata Joe Biden sobre el ultra conservador Presidente Donald Trump.
En cinco entregas publicadas a través de este mismo periódico digital El Pregonero quien suscribe analizó el proceso electoral norteamericano y analizando el movimiento de apoyo por Estado y sometiendo a estudios comparativos las diferentes encuestas proyectamos un resultado con el triunfo de Biden sobre Donald Trump, y aunque muchos dudaban que ese hecho se verificará, insistimos en que los candidatos del Partido Demócrata terminarían imponiéndose por una amplia mayoría tanto en voto popular, con más de ocho millones de diferencias a su favor, así como con el voto de Delegados Estatales.
El Moviendo MAG, que fundó Donald Trump con el que sustituyó al Partido Republicano con ideas ultraconservadoras, racistas y de supremacía blanca, excluyente y divisionista de la unidad multiracial y multicultural que conforma a la sociedad norteamericana, atrajo a sectores con esas inclinaciones políticas e ideológicas para imponer una cultura política de segregación racial y cultural, con fuertes inclinaciones autoritarias para imponerse como instrumento de dominación en la sociedad norteamericana.
Con inventiva y mentiras Donald Trump inició un proceso de difamación del proceso electoral calificado como fraudulento, pero solo en los Estados Pendulares que ganó a Hilary Clinton hace cuatro años de la misma forma en que los perdió ahora, apoyado por el tristemente célebre ex gobernador de NY Giuliani, quien preparó todo un marco legal de impugnaciones de los resultados electorales en esos Estados, expedientes que se fundamentaron en las mentiras y en hechos fantasiosos como pruebas y que fueron rechazados en todos y cada unas de las instancias en que fueron presentadas.
Donald Trump no sólo trató de desmeritar los resultados de unas elecciones que perdió en buena lid, sino que trató de revertir los resultados mediante acciones reñidas con las leyes y la ética presionando a funcionarios locales Estatales a «buscarles 11 mil » votos que el no tenía y calificando la votación anticipada y por correos falsamente como fraudulentos e ilegales.
En la medida que se caían en las cortes de justicia estatales las impugnaciones y litigios invocados por Donald Trump este se fue radicalizado y convocó a sus correligionarios a manifestarse frente al Capitolio para boicotear la Certificación de parte del Congreso de los resultados electorales que proclamaban la victoria electoral de los candidatos Demócratas Biden-Harris. Dicha manifestación devino en turba y los protestante irrumpieron violentamente al interior del Capitolio boicoteando la solemne ceremonia imponiendo el caos y el desorden en una acción claramente conspirativa y golpista que luego fue diezmada por la fuerza pública.
Un Presidente no solo debe saber cómo llegar al Poder, sino que tiene que saber como salir cuando su periodo termina y debe tener conciencia a de los límites del Poder y entender que fuera del Poder Ejecutivo existen los Poderes Legislativos y Judicial que actúan como contra peso en la Demócrata precisamente para impedir la organización y el autoritarismo del Poder Ejecutivo más el gran Poder de la Sociedad Civil y de las Redes Sociales que interactiva como poder de base de la sociedad con una extraordinaria capacidad de convocatoria y de relación social que jugaron roles estelares para derrotar la intentona golpista.
La grandeza del Poder es tan pequeña que con el rechazo popular se desvanece, y el hombre más poderoso del mundo sucumbió sin que se haya disparado un sólo tiro, enfrentado y rechazado por una sociedad que vio cómo durante cuatro años dividió en vez de unir, sembró odios en vez de amor, destruyó valores en vez de construir sueños, y quevintento quebrantar las bases de una sociedad fundada en la unidad multiracial y multicultural sembrando el odio y división.
La gran lección para nuestros gobernantes es que el Poder tiene sus límites y que el Presidente no esta por encima de la Constitución y de las leyes y que tampoco está encima del bien ni del mal, pero ante todo que nada es para siempre.