Jerusalén.- El Ejército israelí bombardeó durante la noche de este viernes varias posiciones militares del movimiento islamista Hamás en Gaza, tras el lanzamiento de un proyectil horas antes contra Israel desde el interior de la franja, informó un nota militar.
“Esta noche (Sábado), aviones de combate del Ejército atacaron varios objetivos militares en un recinto de Hamás en el sur de la Franja de Gaza, y estructuras subterráneas en el norte” del enclave, concretó un portavoz castrense.
La portavocía agregó que la ofensiva fue “en respuesta al proyectil que se lanzó desde Gaza a territorio israelí esta tarde”, y por “la violencia continua que surge” del enclave costero, tras las protestas del viernes por la tarde de la Gran Marcha del Retorno, en las que miles de palestinos protestaron ante la línea divisoria con Israel, muriendo uno de ellos por disparos israelíes.
El Ejército añadió que la movilización de ayer culminó con el lanzamiento de varios globos cargados con artefactos explosivos hacia territorio israelí, y reiteró que considera a Hamás responsable de todos los incidentes que surjan de la franja.
Según fuentes de seguridad palestinas del enclave, los bombardeos no causaron heridos, mientras que las instalaciones atacadas sufrieron graves daños.
Anteriormente, un proyectil fue lanzado durante la tarde de hoy desde Gaza hacia Israel, haciendo sonar las alarmas antiaéreas del Consejo Regional israelí de Eshkol, colindante con la franja, aunque el artefacto arrojado no produjo daños y cayó en campo abierto, señalaron fuentes militares israelíes.
La tensión se ha incrementado entre la Franja de Gaza e Israel estos últimos días, con el Ejército israelí que ha atacado en varias ocasiones durante esta última semana posiciones militares de Hamás, en represalia por el lanzamiento de globos incendiarios, por otro proyectil lanzado y disparos contra sus tropas anteayer, y por múltiples incidentes violentos en la valla de separación.
La volatilidad en la línea divisoria ha provocado desde hace un año siete picos de violencia, con el disparo masivo de proyectiles desde Gaza y bombardeos israelíes de represalia, contenidos por frágiles treguas.
En este último año, desde que comenzaron las protestas de la Gran Marcha del Retorno, 260 palestinos han muerto, además de un soldado israelí junto a la franja y otro en una operación del Ejército encubierta dentro del enclave.