
Por Rosa Iris Luciano
El Pregonero, Santo Domingo – El presidente del Consejo Directivo del Instituto Dominicano de las Telecomunicaciones (INDOTEL), Guido Gómez Mazara, consideró urgente la modificación de la Ley 6132 sobre expresión y difusión del pensamiento, al calificarla como un marco legal obsoleto que ya no responde a las realidades comunicacionales del presente.
Durante su participación en el programa El Día, Gómez Mazara explicó que la mencionada legislación es un reflejo de una normativa francesa de hace más de un siglo, y que mantenerla sin actualización representa una distorsión en el sistema jurídico que rige la comunicación en el país.
“Esta ley 6132 es un calco de una ley de hace un siglo en Francia, necesitamos una solución jurídica civilizada que garantice derechos sin promover abusos”.
El titular de INDOTEL aclaró que no se busca restringir las plataformas digitales ni limitar la libertad de expresión, sino fomentar una cultura de respeto y responsabilidad en el ejercicio del derecho a opinar.
“Aquí no hay intención de restringir las plataformas, por el contrario, hay que democratizar las ideas, pero con criterios”.
En ese contexto, Gómez Mazara defendió el derecho de los ciudadanos a expresarse libremente, pero cuestionó el uso desmedido y sin responsabilidad de las redes sociales, donde según indicó muchas veces se vilipendia a personas sin sustento ni consecuencias legales.
“Estamos construyendo las bases para que la gente recurra a la justicia primitiva, si no establecemos mecanismos legales modernos”.
También se mostró en favor de que aquellos afectados por campañas difamatorias recurran a la justicia para sentar precedentes.
“Yo les he dicho que lleguen hasta las últimas consecuencias, no podemos permitir que se arrabalice el sentido de la opinión pública, opinar no es difamar”.
Criticó el bajo nivel de profesionalización en algunos sectores del ejercicio comunicacional, lo que a su juicio ha provocado una confusión entre lo que es opinión pública y simple publicación.
“El problema es que se ha confundido la noción de opinión pública con publicada y las redes, que pueden ser útiles, también han servido para prostituir el sentido de opinión”.