El valor del servicio al cliente

Por pregoadmin

Por Luis Arriaga

En días pasados fui a retirar un documento a una institución pública, al llegar a dicha sede tomo un ticket de la pantalla táctil que los emite, y al llegar mi turno me dirijo a la posición que me indica en pantalla; llego y observo que la señora Hidalgo, quien fue la persona encargada de atender mi requerimiento, tiene un audífono escuchando algo en su móvil, lo cual dificultó un poco escuchar sus explicaciones con relación a mi requerimiento, pero para sorpresa veo que la compañera también estaba en la misma sintonía, pero lo que le puso la tapa al pote fue que hasta el guardia que presta servicio en dicha dependencia el cual está para cuidar o para poner orden en caso de ser necesario  estaba en las misma.

Me llené de impotencia y pensé para mis adentros, acaso estos colaboradores no tienen un supervisor, por ser una institución del estados no hay un manual institucional o en esa dependencia están como chivo sin ley, lo peor es que esos colaboradores son la imagen de la institución y desde que se penetra al recinto te encuentras con dicha estampa. No diré el nombre de la institución porque considero que con nuestra sugerencia se pueden tomar acciones correctivas para mejorar ese aspectos, aunque ayer mismo escribí por mensaje a dicha institución para informarles sobre dicha situación.

 

Todos los colaboradores de cualquier institución sin importar que sean públicas o privadas, deben estar preparados para recibir con alegría y en aptitud de ayuda a los usuarios de sus servicios, ya que una imagen vale más que mil palabras, y la primera impresión es la que vale y es la que puede llevarnos a hacer grandes negociaciones o al fracaso total con nuestros clientes.

 

Hasta una próxima entrega. Bendiciones.


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