Por Kelvin Ortiz Faña
Por años, el Partido de la Liberación Dominicana se daba el lujo de contar con la mejor estructura política en la diáspora dominicana, dígase, Estados Unidos y Europa, pero su realidad es otra.
El declive del PLD en la diáspora inició con la salida de Leonel Fernández, quien han mantenido ese liderazgo sólido con los dominicanos en el exterior y que hoy, comparte con el Partido Revolucionario Moderno y el liderazgo de Luis Abinader.
No obstante a eso, Abel Martínez tenía muy buena aceptación con los dominicanos en el exterior por su discurso en contra de los inmigrantes haitianos, pero se descuidó bastante y hasta la estructura del PLD, abandonó.
Usted puede contar con los dedos de una mano, las veces que Abel Martínez se ha reunido con los peledeistas en el exterior y les sobras dedos. Un abandono total y que hoy paga las consecuencias. El PLD no tiene estructura en el exterior y los pocos que les quedan, han sido absorbidos por el PRM y Leonel.
No se lo que pensó Abel Martínez para descuidar tan importante representación de apoyo de los dominicanos en el exterior, y para muestra un botón, la reciente encuesta presencial que hizo Somos Pueblo y el Grupo de Medios Panorama lo desmotró, cuando el candidato del PLD, quedó en un cuarto lugar, lejos del tercer lugar, que lo ocupó Roque Espaillat. Eso es mucho que decir.
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