EL PREGONERO, SANTO DOMINGO.- El ingeniero Temístocles Montás minimizó este miércoles el impacto que en términos inmediatos tienen las renuncias que se han producido en el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) tras la salida del ex presidente Leonel Fernández, y enfatizó que el momento impone reactivar la operatividad de las estructuras de base del partido.
“Con el excompañero Leonel Fernández el PLD devino en una organización con dirigentes pero sin dirección y, en términos institucionales, el partido se aniquiló; pero esta situación no ha conllevado renuncias masivas a nivel nacional”, afirmó Montás.
“En el PLD se dio una lucha por la democracia porque Leonel Fernández pretendió erigirse como el monarca del PLD y se rechazó esa actitud. Lo que vamos a iniciar mañana (jueves) en el Comité Político es enrumbar al partido por el camino de la institucionalización”, señaló sobre la reunión del organismo, este jueves a las 5:00 de la tarde.
Consultado por los conductores del programa Matinal 5 por Telemicro sobre su disposición para asumir la presidencia del partido, el dirigente se definió como un “militante dispuesto a trabajar”. “Hay que trabajar para recomponer los órganos del partido y rescatar el orgullo del PLD para apuntalar la candidatura de Gonzalo Castillo de cara a 2020”.
El dirigente afirmó que los acontecimientos de los próximos días podrían determinar qué va a ocurrir de cara a las elecciones nacionales de febrero y mayo del próximo año, por lo que considera prudente observar cómo se desarrollan los hechos.
Montás no descarta el surgimiento de un escenario tripartito o incluso de una cuarta fuerza electoral. “Todo va a depender de cómo se terminará de reconfigurar el panorama político nacional, pero nuestra estrategia será trabajar para ganar en una primera vuelta”, dijo.
Manifestó que el reto es continuar el trabajo del partido para que la actual gestión del Presidente Danilo Medina concluya con éxito y se mantenga la estabilidad macroeconómica, una situación que en la actualidad coloca a República Dominicana por encima de todas las proyecciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) para la región Latinoamericana.