Por Janet Camilo; Ministra de la Mujer Rep. Dominicana
Se acerca nueva vez el final de febrero con el retomamos la participación de todos los dominicanos en la gesta heroica de independencia del 27 de febrero 1844. Un día heroico donde dominicanos y dominicanas, hombres y mujeres jóvenes, decidieron levantarse, ponerse de pie y alzar sus voces para que nuestro país pudiese volver a ser libre e independiente de toda potencia extranjera.
Y ahí estábamos las mujeres, ahí estaban dominicanas mujeres jóvenes, acompañando como siempre en la historia de todas las lucha por reivindicar los derechos en la que hemos participado silenciosamente, invisiblemente juzgadas por la historia.
Mujeres de febrero mujeres valientes, cuidadoras de vida, defensoras y luchadoras por nuestro territorio, por nuestra independencia, por nuestra soberanía.
Estuvieron ahí no solamente bordando bandera, no solamente ocupadas en la agenda del cuidado, estuvieron ahí en las primeras filas con fusiles en las manos, con ideas libertadoras, revolucionarias, fuertes. También ellas estuvieron de pie, también ellas alzaron su voz, también ellas sostuvieron fusiles en sus manos disparando la esperanza hacia nuestra independencia.
Y hoy hacemos una mirada a la historia y quizás no las encontremos todas, quizás no, y sin quizás sus nombres no aparecen, son pocas las que pudieron ser escritas con tinta sobre papel, pero les aseguro que fueron muchas las que con su sangre escribieron el 27 de febrero.
Mujeres como Maria Trinidad Sanchez, Micaela de Rivera, Froilana Febles, Maria Baltasara de los Reyes, Ana Valverde, Filomena Gomez de Coya, Rosa Montas de Duverge, Rosa Bastardo de Guillermo, Rosa Duarte y Diez, Concepcion Bona y Hernandez, Maria de Jesus Pina, Maria de las Agustias Villa, entre otras dejan claro que las mujeres estuvieron presentes y confiaron en el proyecto libertario de Duarte porque compartían el ideal de liberar nuestro país.
Y hoy no la vamos a olvidar a esas heroínas sin nombre, a esas humildes del montón salido que con su sangre fecundaron nuestra libertad, nuestra independencia, nuestra soberanía, hoy su voz y su gloria también han de escucharse como protagonistas de febrero, como heroínas libertadoras de la nuestra querida patria Dominicana.