La resiliencia en Mipymes: Factor determinante para salir de la crisis

Por pregoadmin

Por: Luz Estrella


En este momento de crisis a causa de la pandemia del COVID-19 las MiPymes más que nunca se ven obligadas adoptar la resiliencia empresarial como un factor determinante para salir de la crisis y asumir actuaciones que generen adaptación a los cambios constantes.

Esta crisis sanitaria nos deja muchas lecciones aprendidas a los sectores económicos en especial a las MiPymes, una de las más importantes es la necesidad prepararnos para afrontar una crisis de cualquier índole (económica, natural, bélica, etc.). La dirección estratégica, la visión del negocio, el posicionamiento en el mercado, la situación financiera, el marketing, la publicidad, la estructura de información, el equipamiento, los soportes tecnológicos y un sin fin de otras cuestiones relevantes en la dirección de empresas son, sin duda alguna, muchos de los factores que coadyuvan a lograr ese desempeño diferencial que se debe asumir en momentos difíciles.

Por lo que es que este momento es oportuno para que hablemos de La Resiliencia que sustenta los modelos de resistencia y alude a las fortalezas. Este aporte permite la evolución de los atributos de los individuos y las instituciones para enfrentar las adversidades haciendo base en aspectos fundamentales como la cultura y los valores de la sociedad. Cuando una empresa que logra hacerlo con el menos grado de afectación es aquella que puede ser considerada como resiliente. 

La resiliencia aloja los desarrollos intelectuales y críticos, abriendo el juego a otras miradas posibles, con creatividad, con innovación, en un mundo más hostil y turbulento. En este sentido, las empresas resilientes serían aquéllas que, en épocas de cambios constantes derivados de crisis económico-sociales y/o de la globalización de los negocios, presentan un desempeño superior a otras y obtienen aún beneficios extras provenientes de circunstancias adversas o imprevistas.

Si partimos también del concepto de que la resiliencia es la cantidad de cambio o transformaciones que un sistema complejo puede soportar manteniendo las mismas propiedades funcionales y estructurales. Lo más significativo es entender que la resiliencia no es una propiedad absoluta y fija, sino que, por el contrario, es variable en el tiempo y el espacio, y depende en gran medida de las acciones y relaciones del sistema y de la volatilidad del contexto en el que se encuentre.

Si las empresas en especial las MiPymes hacemos que esta situación nos aumente la resiliencia, potencializaremos las posibilidades de pasar a un estado o configuración organizacional diferente, incluso aun estando como ahora sujetos a perturbaciones. Con este aprendizaje lograremos mantener el potencial resiliente y nos llevara a plantearnos escenarios posibles que pongan en riesgo la estabilidad de la empresa para poder tomar medidas preventivas, una empresa que no tiene visión y prevención ante siniestros es altamente vulnerable, por eso la resiliencia debe ser asumida como una cultura que nos dé prioridad en las nuevas estrategias.

La flexibilidad es indispensable en la actualidad, pues las exigencias del mercado y la situación de crisis nos obligan a mantenernos en total expectación para no quedarnos atrás en esta lucha competitiva. Los efectos de no tomar en cuenta este tipo de medidas pueden resultar en pérdidas catastróficas y peor aún, para las MiPymes puede significar la desaparición total de la unidad productiva. 

En RD la estructura MiPymes es ampliamente comparable en todos los niveles, siendo los impulsores principales de la productividad, por lo que; a pesar de que enfrentamos barreras de larga data para superar condiciones empresariales severas o acceder a recursos estratégicos, debemos ser quienes asumamos con mayor determinación la resiliencia empresarial. Esto obliga también a que las MiPymes seamos uno de los blancos principales de las políticas públicas, siendo por demás crucial en la agenda política nacional de los actuales y futuros gobernantes, como única vía para que el país de respuesta a los desafíos que surgen con la globalización.

La resiliencia empresarial no siempre se logra y, por ende, existen empresas que cierran.  Los factores resilientes son elementos de importancia a considerar, especialmente, las más jóvenes y vulnerables las cuales mayormente afrontan situaciones complicadas: la innovación, la planeación y el compromiso son determinantes para que alcancemos el éxito empresarial, en especial las micro, pequeñas y medianas empresas ya que son sistemas sociales sumamente frágiles que potencian la capacidad de los pobres para diversificar y complementar sus fuentes de ingresos.


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