El Pregonero, Santo Domingo.- El coordinar del Movimiento Rebelde y Vicepresidente del Partido Frente Amplio, Juan Hubieres del Rosario, respaldó el pronunciamiento del Episcopado Dominicano que exige un alto inmediato a la xenofobia y al falso patriotismo que solo busca derramar sangre y odio frente a los migrantes haitianos.
«Es tiempo ya de frenar la indiferencia y la complicidad social y oficial frente a este mal que nos conducirá a todos los habitantes de la Isla a un enfrentamiento brutal que no ataca el mal en sus raíces», manifestó Hubieres.
Además, el dirigente político manifestó que están buscando el mal en la sabana.
«La fiebre consume nuestro tejido social y buscamos el mal en la sabana. Es urgente dar la cara con responsabilidad a los que mantienen en nuestro país a centenares de haitianos para utilizarlos como mano de obra muy barata y sin derechos laborales y humanistas».
También, se refirió a los distintos sectores de la economía dominicana que usa esa mano de obra muy mal paga a asumir su responsabilidad social y económica de cara al país y no guardar silencio cobarde y cómplice frente al fascismo altamente peligroso que grupos de odio han venido introduciendo mediante la manipulación en la psiquis colectiva del dominicano carente de conocimientos sobre la situación real.
«Los grupos y sectores económicos que bastante se benefician y necesitan esa mano de obra que actúen, pues mientras ellos aumentan sus riquezas y bienes con el trabajo de los haitianos, estimulan con su mutismo e indiferencia actos moral y éticamente condenables», manifiesta Hubieres a través de un documento enviado al periódico El Pregonero.
Juan Hubieres también fustigó la complicidad del gobierno que no actuar con responsabilidad de Estado frente al problema migratorio y al abandono de las zonas fronterizas por parte de los dominicanos frente a las malas y pésimas condiciones de vida y la ausencia de trabajo digno y servicios dignos que garanticen flujo de otros dominicanos en busca de empleos de mínimos cualidades como seres humanos.
«El gobierno/Estado están en la obligación inmediata de poner coto al desorden fronterizo y migratorio, garantizando seguridad y paz social a los dominicanos y a los migrantes. El Estado no puede actuar con políticas de coyunturas sino con un plan estratégico de desarrollo fronterizo y nacional que ayude al crecimiento digno de la gente; con agua; Salud; educación; vivienda; empresas basadas en la ley de desarrollo de zonas fronterizas que hoy es usada en alto porcentaje para el contrabando de grupos de poder».
El dirigente político hizo un llamado al Gobierno a preservar el mercado haitiano.
«Es necesario también preservar el mercado haitiano que es el segundo comprador de productos dominicanos. Sin ese mercado la economía nacional iría a la quiebra. Igualmente sucedería sin las manos de obra haitiana en los actuales momentos. Al tiempo de saludar la valiente posición de la Iglesia Católica Dominicana, también mostramos nuestra condena infinita a los auspiciadores de la xenofobia y la violencia contra los hermanos trabajadores haitianos. Si llegase a derramarse sangre y violencia humana los grupos de odio xenófobos y el Estado y los grupos empresariales y de producción de bienes y servicios serán los únicos responsables conjuntamente con Francia, EU y Canadá», acotó.
Por Kelvin Ortiz Faña