El Pregonero. Santo Domingo.-Más de 30 muebles e inmuebles exige el expelotero de Grandes Ligas Octavio Dotel que se le devuelvan, además de otras pertenencias que le fueron incautadas a su esposas e hijos durante los allanamientos del 20 de agosto de este año, cuando un amplio operativo fue puesto en marcha para desmantelar la banda de César Emilio Peralta (El Abusador.
Los abogados del exbeibolista Manuel Sierra, Ybo Rene Sánchez e Ivelia Batista, solicitaron a la Procuraduría Especializada Anti Lavado de Activos la devolución de estos bienes.
También dijeron que la Procuraduría General de la República bloqueó las cuentas bancarias de la esposa del expelotero, sin tener la debida orden judicial.
La documentación depositada ante las autoridades establece que los bienes incautados no tienen ninguna vinculación con los hechos que se les imputan al pelotero, “tal como expresara el juez de Atención Permanente del Distrito Nacional, José Alejandro Vargas, cuando rechazó dictarle prisión preventiva, con excepción de las armas de fuego incautadas, razón por lo que le impuso el pago de una garantía económica de un millón de pesos, impedimento de salida y presentación periódica”.
En su documento, los abogados también mencionan que la Procuraduría dijo a los medios de comunicación nacional que iba a “retirar todos los cargos en contra del señor Luis Castillo (indicado como coautor del crimen de lavado de activos junto a Dotel Díaz, ya que ambos expeloteros fueron señalados como coautores de la compra de una villa, que luego se comprobó que fue objeto de una negociación licita, legal y sin ninguna conexión con la red de César el Abusador”.
Sostienen que todos los bienes incautados a títulos de propiedad y posesiones personales de Massiel Javier, quien está casada con Dotel Díaz, bajo el régimen de separación de bienes, no guardan ninguna relación con los hechos investigados, ni con las acciones realizadas por el Ministerio Público.
De acuerdo con lo dicho por el abogado Manuel Sierra, las acciones de la Procuraduría le está generando inconvenientes familiares tanto a la esposa del expelotero como a los hijos de estos.