Todos nos horrorizamos cuando vemos noticias de la delincuencia en Venezuela, Nicaragua, El Salvador y/o México, una nación con áreas enteras en manos del narcotráfico y donde en una campaña electoral han muerto mas de 150 personas.
El peor miedo de todos es el de terminar como esas naciones, muchas de las cuales son más ricas que nosotros en territorio y en recursos naturales e incluso se podría decir, que son ricas y que no han podido controlar sus niveles de inseguridad ciudadana.
Esta semana se han realizado 3 asaltos a entidades bancarias en nuestro país, un crimen raro, porque ha sucedido en contadas ocasiones, pero el que sucedan una detrás de otra, muestra como la delincuencia va en escalada.
Los gobiernos del PLD éxitosos en muchas áreas (por algo repiten) tienen dos talones de aquiles, los cuales parecen fuera de control, la delincuencia es el primero y la inmigración indocumentada es el otro, si llegasen a encontrar una solución a estas problemáticas se casan con la gloria.
Mientras, la inseguridad ciudadana hace mella en la psiquis de todos y cuando explote la situación entonces no lloremos.