Estas últimas semanas han sido pésimas para la imagen internacional del país, dos diplomáticas son asaltadas, una turista es atacada, dos fallecen, en estos últimos casos podemos aducir que era imposible de evitar, pero el caso de David Ortiz nos pone una letrero gigantesco que dice PELIGRO cuidado al entrar.
Si a una figura tan querida y revenrenciada como Big Papi un delincuente, se atreve a atacarlo en medio de una multitud y arriba pensando que podrá escapar, es porque se le perdió el miedo a la autoridad y la sociedad dominicana perdió el control.
Este no es un hecho aislado, sucede todos los días y tanto que hemos perdido la capacidad de asombro. Ha llegado la hora de poner fin a la inseguridad ciudadana, porque o se la pone el Estado o la harán los ciudadanos.
¡Presidente, tenemos miedo!