Dr. Bernardo Rosario
Para muchos dominicanos, viajar a los Estados Unidos, especialmente a Nueva York, es un sueño profundamente arraigado en la cultura. Es muy común decir “Nueva York” a cualquier estado o ciudad de los Estados Unidos, pues para nosotros no solo representa oportunidades económicas y progreso, sino también un vínculo emocional
con familiares y amigos que han emigrado en busca de un mejor futuro.
Caminar por Times Square, tomarse fotos en la escalera roja, ver la Estatua de la Libertad o
simplemente experimentar la vida vibrante de la ciudad es un anhelo común, impulsado por historias de éxito y el deseo de ser parte del dinamismo neoyorquino.
Hoy más que nunca es posible hacer turismo, negocios e incluso recibir tratamientos médicos en Estados Unidos gracias a la visa de turismo B1/B2, mejor conocida como visa de paseo o de 10 años. Nos ofrece una puerta de entrada a innumerables oportunidades.
No solo permite explorar destinos turísticos icónicos, sino que también abre la posibilidad de recibir tratamientos médicos de calidad y explorar nuevas oportunidades de negocios. Ya sea para disfrutar de unas vacaciones, buscar atención médica especializada o iniciar proyectos empresariales, esta visa es una herramienta versátil y valiosa. Contar con ella puede ser clave para quienes buscan combinar el placer con otros beneficios importantes.
La documentación requerida para solicitarla incluye un pasaporte válido, una fotografía, completar la solicitud de visa y pagar la tasa de 185 dólares.
Es posible que se soliciten documentos adicionales para determinar si el solicitante reúne los requisitos.
Por ejemplo, estos documentos pueden incluir evidencia del propósito del viaje, la intención de salir de los Estados Unidos después del mismo y/o la capacidad de pagar todos los costos del viaje.
La prueba de empleo y/o de vínculos familiares puede ser suficiente para demostrar el propósito del viaje y la intención de regresar al país de origen. Si no se pueden cubrir todos los costos del viaje, es posible presentar pruebas de que otra
persona cubrirá algunos o todos los gastos.
Con un buen asesoramiento en temas migratorios, tendrás más probabilidades de éxito. Y recuerda: ¡están dando visa
